¿Porqué tanto miedo a los carbohidratos?

Todos en algún momento de nuestras vidas vimos a los carbohidratos como los malos del paseo, el pan engorda, no me de arroz, las papas y yuca, de vez en cuando. Todo esto, en algún momento pierde validez cuando la falta de este grupo de alimentos, nos hace caer en la monotonía, desaliento y algunas veces en desordenes hormonales que surgen por esos regímenes estrictos en la alimentación.

En todas mis reflexiones de años he tratado de entender mi cuerpo y sus necesidades, curarlo a través del ejercicio, la alimentación y la meditación. En este camino me encontré un día con una escena que reforzo mi idea de que el equilibrio en la alimentación como en todo lleva al bienestar y el sentirse bien. La escena, era en Boyacá con los trabajadores que le ayudan a mi hermano en la finca, era una pareja joven con tres hijos hermosos, llenos de vida, felices en esa vida con un patio inmenso y animales alrededor. Naturaleza en todo su esplendor. Además de esto lo que me llamo la atención fue el almuerzo que nos ofrecieron, un plato con arroz, papas y agua de panela. Me dice la Señora que si quería tomate pero ese día lo único que quise fue disfrutarme como nunca esas papas preparadas en horno de carbón, ese arroz casero y luego una bebida caliente típica de nuestro país que es muy valorada por ellos.

Ella, ese día me contó que es lo que suelen comer y que algunas veces complementa el plato con un poco de carne, pero que no es lo mas normal. Luego de esto pensé en las largas jornadas de trabajo que tienen caminando detrás del ganado, además comienzan el día en la madrugada y finalizan al caer la noche con el cansancio en sus piernas de días llenos de sol o viento frio. Son muy activos y no suelen enfermarse con frecuencia.

Conocerlo me ayudó como muchos encuentros con personas que tiene mucha salud, longevos y activos a entender que no es un tema de los carbohidratos, es un tema de las porciones, el tipo de carbohidrato, las preparaciones y como siempre el ingrediente principal ser personas activas, porque con tanta energía lo mejor es canalizarla por medio de la actividad física y mental. En este punto mi recomendación es guiarse por un proceso de coaching nutricional para entender por medio de herramientas de autoconocimiento estos aspectos de la bioindividualidad que nos permitirán llegar con mayor facilidad a esta sintonía.

Yo me curé de un desorden hormonal entendiendo que una buena fuente de carbohidratos son la gasolina, que mis órganos funcionan mejor si no sufren de restricciones alimentarias de algún tipo y mas bien se nutren con alimentación balanceada que sea fuente de energía, ojalá de la tierra.

Y si finalmente es un proceso de retomarlos, agradecerlos y saberlos preparar ojalá en platos caseros. Y si los vamos a consumir en restaurantes, seleccionar la forma de cocción más limpia y disfrutarlos. Les aseguro que además de romper paradigmas, encontraremos que ese cuerpo que a veces pedía auxilio de gasolina extra, tendrá un combustible dosificado que nos mantendrá andando. Prevenimos si es el caso o curamos esas fatigas, cansancio y falta de energía que es el común denominador en esta vida movida que constantemente nos pide mas acción y menos descanso. No está mal, pero no está demás parar, descansar y volver a lo local, lo que finalmente nos esta dando esta tierra donde nacimos.

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